22/05/2018, Por Virginia Fenández

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A través del teatro foro, la compañía Vagabundas Teatro pretende sensibilizar y favorecer la toma de conciencia de la población en general en cuestiones de género a través de la escucha y la acción escénica. En particular se centran en el tema de los cuidados en nuestra sociedad, y de cómo sigue siendo una tarea invisibilizada y asumida como propia por las mujeres con todo lo que ello conlleva de pérdida de autonomía, posibilidades de decisión sobre sus propias vidas.

En Con-Vivencias actuarán este año el 8 de junio a las 20h00, con la obra "No puedo más", en la sala El Umbral de Primavera, con el fin de que sean los propios espectadores quienes propongan sus propias soluciones alternativas. Hemos hecho algunas preguntas a la compañía, curiosas por la evolución del proyecto. 

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¿Cuáles serían los mayores condicionantes existentes actualmente para la mujer a la hora de romper barreras y generar nuevas reglas de convivencia? 

Pensamos que las mayores cargas condicionantes o barreras estarían relacionadas con las exigencias que se nos presuponen como mujeres, en el momento actual, sentimos que se ha generado la expectativa de "superwomans" mujeres que pueden con todo, y que están satisfechas con ello, y desde esta perspectiva lo que desde nuestro grupo valoramos y cada vez escuchamos más es como las mujeres sufrimos grandes niveles de  carga mental (un clásico ejemplo de esto sería "¿es qué tengo que estar yo siempre pendiente de todo), de cargas de cuidado (seguimos siendo las que pedimos reducción de jornada, abandonamos nuestras carreras profesionales, nos encargamos del cuidado de mayore, peques o personas con diversidad funcional, vamos a las reuniones del cole, acompañamos al médico....) y por supuesto de cargas productivas... lo que en conclusión genera aislamiento y por lo tanto dificultad para crear espacios propios de cuidado, disfrute y sororidad. 

 

¿Cómo ha ido cambiando la obra "No puedo Más" todo este tiempo al interactuar con el público, a la hora de abordar las frustraciones y los mandatos sociales?

Sentimos que hasta ahora, en este algo más de año y medio que llevamos trabajando sobre ella,  hemos aprendido mucho de las devoluciones del público así como de la lectura que nosotras podiamos hacer sobre lo que pasa en cada teatro foro, gracias a este bagaje hemos introducido y generado más matices en nuestros personajes para facilitar referentes más diversos, que permitieran que el montaje fuera más inclusivo y abierto, e incluso hemos creado una escena nueva para enriquecer más nuestra historia. Por otro lado, también sabemos que esta transformación del espectáculo se mantiene, y cada oportunidad de mostrarlo es un buen momento para que este siga evolucionando.

 

 

¿Cómo este proyecto os ha cambiado a las componentes del mismo y de qué manera ha despertado vuestro lado más inconformista?

La escucha de públicos tan diferentes en este tiempo nos ha hecho crecer en nuestra conciencia feminista, no es que no la tuviéramos, que por supuesto que sí (¡si no no hubiéramos podido crear una obra de teatro foro! pues es esta sociedad patriarcal la que a nosotras nos atraviesa), pero si tenemos que destacar que  el hecho de trabajar desde lo concreto, desde el acompañamiento, desde el teatro y el juego nos permite mantenernos en un replanteamiento constante, caminando como grupo pero también como personas individuales y generando lazos y redes que nos facilitan poder seguir aprendiendo. Por otro lado, el hecho de poder seguir compartiendo nuestro montaje nos hace sentirnos como activistas del movimiento. 

En conclusión, eramos inconformistas, y el teatro foro nos empuja a que sigamos siéndolo.

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