14/05/2018, Por Virginia Fernández

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La semana pasada el  Congreso aprobaba la proposición de ley del Parlamento de Cataluña que pide una reforma del Código Penal para despenalizar la eutanasia y la ayuda al suicidio, un primer paso para regular y debatir sobre un tema que sigue siendo tabú en nuestra sociedad.

La obra "LIbres Hasta El Final" que participará este año en Con-Vivencias 2018, el día 8 de junio, a las 18h00 en la Sala Espacio Escénico La Mínima,  entra de lleno en este tema a través del teatro documental. En esta obra, diez expertas  dirigidas por profesionales del medio nos descubren que cada persona vive la muerte como vive la vida, de forma personal y por tanto diferente.  Los  espectadores observaran sus propias reacciones cuando se encuentren con testimonios de la experiencia vivida: dolor,  impotencia, miedo, serenidad, escenas divertidas, cómicas, risas, música… Se muestra también el estado de la cuestión política y social, llena de incertidumbres e injusticias,  porque se encontraran con diez personas comprometidas y reivindicativas con el derecho a decidir como y cuando morir y tener recursos pata poder hacerlo con dignidad. Hemos querido hacer algunas preguntas al director de la obra Juan Pedro Enrile, para profundizar en cómo el teatro puede ayudar a concienciar a generar cambios en ese sentido.

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De qué manera crees que se aborda el tema de la ConVivencia, a la hora de tener potestad ante decisiones tan importantes como el derecho a morir dignamente?

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Aprender a morir es aprender a vivir. No creo que se pueda vivir plenamente si antes uno no ha aprendido a morir. Tanto una cosa como la otra se hace necesariamente conviviendo, compartiendo con el otro uno aprende a vivir y a morir.

 

¿Es posible según tu opinión transformar la sociedad a través del teatro testimonial o documental, de qué manera puede contribuir a cambiar las leyes?

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Claro que sí puede, esa es la razón por la que hacemos teatro documento. Con este tipo de teatro se pretende concienciar, visibilizar, persuadir de determinadas cuestiones al público que asiste al teatro. En este caso concreto el tema que nos ocupa es la necesidad de legislar el derecho a una muerte digna. El teatro solo no puede cambiar las leyes, pero si se suman al teatro muchas otras fueras como la movilización ciudadana, la presión a los políticos, el apoyo de los medios de comunicación, el cine, la visibilización de casos concretos y muy conocidos en relación a la muerte digna, etc., entonces sí se lograrán modificar la leyes y por lo tanto el mundo en el que vivimos. En cualquier caso, quizás la pregunta no me parece las más adecuada, ya que lo importante no debería ser si con los hechos que hacemos en la vida lograremos determinados objetivos, en este caso modificar las legislación, sino si tiene sentido la lucha, en sí misma, sin resultado alguno. Si merece la pena intentarlo, yo creo que sí. Incluso en la hipótesis de que no se lograra modificar la legislación en torno a la muerte digna, la lucha seguiría teniendo todo el sentido ya que estaría dando sentido a nuestra vidas.  

 

¿Qué puntos clave más importantes y más tabú crees que saca a relucir la obra Libres Hasta El Final?

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La muerte sigue siendo un tabú en nuestra sociedad. La sociedad está organizada en torno a unos valores contrapuestos a la muerte, la vejez, el sufrimiento, etc. Por lo tanto creo que hablar de la muerte y sobre todo de cómo queremos morir es importante ya que pensamos que mucha gente no es consciente de lo mal que se muere en nuestra grandes ciudades europeas, y de la necesidad de protegernos ante situaciones que nos parecen inaceptables.  ¿Cuáles son las razones por las que a un enfermo terminal que solo le espera la muerte en agonía, y con un gran sufrimiento no se le permite finalizar dignamente? Esa es la pregunta que queremos responder con este espectáculo además de ofrecer soluciones para que cada espectador tenga más derechos al final de su vida. 

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